Al año siguiente, también de blanco, derrotaron al Benfica (1-0) en el Prater, repitiendo la historia de 1963. Estaba claro que las cosas con esa camiseta iban bien. En el año de la llegada de Beckham, estos son redondos con una abertura en el centro. Los tres hijos que tenemos son iguales para sus padres. Presenció en un palco privado el Clásico, se llevó la alegría de comprobar que su amigo era titular y mostraba que todavía tiene nivel y carácter para ser competitivo. Curiosísima historia, y de cómo el poder político siempre ha intentado utilizar el fútbol para sus propios fines y su propia propaganda, que vendría a ser el bojetivo de este uniforme negro en definitiva. O intentando ser más suave jejeje, me parece un fichaje arriesgadísimo por parte del Barça fichar a un jugador de estas características por la pasta que han pagado. Por otra parte me da muy mal fario el tema de los patrocinadores y el riesgo de su capacidad de decisión sobre el jugador.
Por cierto, hoy la página carga mal y no veo los twiter en el lateral. Y para darle más carga a la camiseta, toda la historia que lleva detrás hace que sea aún más especial. En el partido de cuartos de final entre Italia y la selección anfitriona, y por orden directa del duce, Benito Mussolini, la selección italiana vistió de negro: camiseta, milan equipacion pantalón y medias. Pues porque es el color heráldico de los Saboya, la familia real italiana que se hizo cargo de la jefatura del Estado tras la reunificación. La única variación que ha sufrido la indumentaria « txuri urdin » ha sido la intensidad del color azul, más claro en las recientes temporadas. Cabría preguntarse si el segundo uniforme de España durante la época de Franco, que era completamente azul, tendría que ver con los colores falangistas, aunque yo creo que no porque las camissas eran azul marino, de un tono más oscuro que el que llevaba la selección… Pues yo pensaba que TODAS sus Copas de Europa las había ganado con una camiseta blanca, excepto la de 1969, aunque 6 de 7 no está nada mal y ya es motivo suficiente como para pensar que da suerte.
PD: En otras competiciones, como la Intercontinental, la cosa no sigue un patrón. Como aquel gol donde levita en escorzo manierista y de tacón le deja a Karim una pelota botando que entró por la escuadra. Pero vamos alli estaba Desailly que no dejaba pasar ni una pelota en su zona. Y el mito se desató cuando un año después, el Milan de blanco destrozó al Barça en Atenas, con goles de Savicevic (foto), Desailly y el incombustible Massaro. La primera de las veces en las que Italia jugó de negro fue en un amistoso ante Francia, en Roma, en 1935. Un año después, en los Juegos Olímpicos de 1936 en Berlín, también vistieron de esta guisa. La verdad es que desde la época de los holandeses el Milan ha marcado un antes y un después, y una de las imágenes que se nos viene a la cabeza en sus exitos desde entonces es esta camiseta. El mito creció mucho en 1993, cuando en la final de Munich el Olympique de Marsella de Desailly, Deschamps, Bokisc y Pelé derrotó a un Milan rossonero. Martin Hongla será blanquivioleta hasta final de temporada. Sobre el tema candente de los últimos días, aunque un servidor se alegra por un lado de poder contar para la próxima temporada a una joven promesa como Neymar, mi sentido común me advierte del riesgo de fichar directamente de Sudamérica.
Recuerdo que en cuartos de la Champions de la pasada temporada nos tocó jugar con ellos (tras haberlo hecho ya en la fase de grupos) y curiosamente, en lugar de recibirnos de rossonero como en el último partido lo hicieron con la maglia fortunata (quizá buscaban motivarse). El escudo no variaba: la cruz de la casa de Saboya y, eso sí, los fasces (las varas y el hacha, símbolo procedente de la Antigua Roma que el movimiento fascista italiano adoptó como propio). El Atlético había vestido en sus inicios de blanquiazul, pero las camisetas del Blackburn Rovers que nunca se pudieron comprar acabaron por enterrar esos colores. Pero, en sentido estricto, no duró mucho, porque en 1969 el Milan regresó al máximo escenario continental, en el Bernabéu, y allí derrotó por 4-1 al Ajax de Cruyff vestido de rossonero. Tras esa fecha, el Milan ha jugado otras tres finales europeas, todas de blanco. Sea como fuere, y a pesar de las experiencias de 1995 y 2005, el blanco en las finales de Copa de Europa para los milanistas es sinónimo de alegría. Como elucubración mía ahí queda jejeje. En cualquier caso en ese partido tendrían que cambiar de uniforme de todas formas porque Francia también iba de azul (bueno, me imagino que en aquella época ya iba de azul, igual me he pasado de listo jejeje) pero que fueran completamente de negro, siendo el color de las camisas negras, canta un poco, efectivamente.
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